megagripa 2004

tenía como 10 o 12 años cuando me dió mi rachita de ir a la sala de urgencias cada fin de semana. Creo que no era yo solita la descompuesta, sino que mi hermano y yo alternábamos el puesto. Con decirles que llegamos al punto que mis papás invitaban a los residentes a cenar (¡neta!).

Una de mis tantas ocurrencias terminó con un picahielos que me atravesaba la mano izquierda. El mango estaba en la palma, el pico del otro lado. Me reservo los detalles de como llegó ahi el picahielos, basta con decir que fue una estupidez mayor y que tengo la suerte de tener intactas las terminales nerviosas.

El caso es que llegué con mi papá, entre asustada y orgullosa (algo muy propio de los niños). Lo primero que hizo mi señor padre fue darme un pisotón. Sus chorrocientos mil kilos de peso dirigidos a mi pobre piecito. Auch. Comencé a quejarme y defender mis derechos infantiles cuando me enseñó el picahielos, totalmente fuera de mi mano. ¡Y lo entendí! Me pisó para distraerme mientras me sacaba el picahielos de la mano (aún así, ese pisotón estuvo demasiado fuerte, según yo). Si no hubiera estado distraída con el pisotón, me hubiera clavado en el asunto picahielos y todo hubiera sido un drama.

Pues este fin de semana pasó algo semejante. Tuve la megagripa 2004 y estuve en cama. No me bañé, no saqué al perro, no hice más de dos comidas. Estuve en posición horizontal, con una buena caja de kleenex y una dotación ilimitada de limonada. Tan ocupada estuve con mi gripa que se me pasó de noche la dichosa comida de los buzos y el teletón. ¡Gracias Dios!

Por otro lado, hoy ando optimista. Me cae que es cierto que todos obtenemos lo que necesitamos. El viernes era la cena de fin de año de los escaladores y, debido a la incipiente gripa, hablé para cancelar. ¡No me dejaron ausentarme! Hasta fueron por mi a la casa para asegurarse que asistiera. En este grupo si es grata mi presencia, no como en oooooootros. El caso es que fui, me divertí mucho y junto con la esposa y la puerc, formé parte del mejor trío de karaoke del planeta. Gracias chicos, me dieron justo lo que necesitaba.

Sigo mocosa. No se por que estoy en la ofi, pero lo que si se es que no estaré mucho tiempo. Me regreso a mi camita.