September 21, 2005

flotando

si, los tenía bieeen abandonadotes, pero eso es lo que pasa cuando un charal se dedica a vivir su vida y se olvida del cibermundo.

Ando flotando en las nubes. Con una paz que los últimos 6 años de friega intensa no había tenido, una sonrisa boba como de nadador sincronizado y mucho daydreaming.

Soy feliz por que reencontré a un viejo amigo, le subimos el status a mejor amigo y luego a novio. Alguien que creció exactamente como yo y compartió el vecindario cultural (gracias a txuicano por el término sociológico) e inclusive sabe exactamente que como se oye el silbato del tren a las 6 de la mañana en el primer día de clases.

Este fin de semana Ramón se refirió a nosotros como "almas gemelas". Aunque me mantengo alejada del concepto por todo lo cheesy que puede ser, creo que Ramón tiene algo de razón. ¿Cómo explicas mismos gustos musicales cuando has estado separado más de 15 años? ¿Haber viajado a los mismos lugares? ¿Ser igual de nerds al jugar Maratón? ¿No darnos cuenta del inmenso señalamiento de SPI en la carretera y llegar al puente internacional de regreso a México por andar papaloteando?

Lo quiero.

Y no como cuando era chavita que me gustaba por que tenía ojos bonitos. Esa parte ya la superamos cuando nos hicimos amigos la primera vez. El día de hoy puedo decir que lo quiero por que es la persona más interesante que conozco, por que podemos hablar de todo y nada, por que nadie me comprende como el, por que cuando hago algo con mi día no puedo esperar para contarle, por que tengo mucho de descubrir de el y con el... y la lista sigue.

Este fin de semana se me ocurrió decirle que lo quiero. Este era un tema bastante escabroso por que nunca tengo suerte con ello. La primera vez que le dije eso a alguien no lo sentía genuinamente. Luego con otra persona, el imbécil me contestó "Well, that's your problem". La siguiente ocasión el huachi se quedó viendo al techo y no dijo nada.

Pues bueno, como que regioman estuvo buscando el comentario y yo la neta ya no podía guardármelo por que me ardían los labios por no contar. Le dije, de la forma más breezy posible "¿Sabías que te quiero?" y respondió "Lo sospechaba". Y ya. No es el escenario ideal, pero al menos está a años luz de las otras ocurrencias patéticas.

Pero no importa. Mantengo mi postura: lo quiero!

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