Hoy visité el tianguis de mi colonia. Es curioso que llevo dos años en este depa y el tianguis se pone todos los miércoles sobre mi calle, justo a una cuadra de aquí, pero nunca había ido. En parte por que a esas horas estaba trabajando, en parte por que este primer mes de transición he estado bastante ocupada.
Cuando vivía en la Napoles no perdonaba la visita obligada al tianguis de los domingos. Me paseaba un rato, comía barbacoa, compraba algo de fruta y chácharas varias y de ahi al parque a escuchar al tenor que cantaba a la 1.30 en el anfiteatro. Pero en la Del Valle no había tenido oportunidad hasta hoy.
El tianguis no es tan grande como los de los domingos en otras colonias. Es como una cuarta parte apenas, pero cumple bien con sus funciones. Chácharas y espejitos, pollos, cosméticos, verduras, flores, quesos... Como siempre, las frutas son más caras que en el super (por ejemplo, la naranja para jugo esta a $5 en el super, en el tianguis a $8), pero son diferentes por que:
- no tienes que esperar toooda una semana para que la dichosa fruta madure y te la puedas comer
- el sabor es inigualable
- lo vende don mateo, quien se encarga de elegir las frutas mas jugosas y sabrosas y en caso de que tengas duda, saca el cuchillo-machete y te da un buen pedazote de fruta pa que compruebes la calidá
- cuando comienza a llover ves el magnífico despliegue de ingeniería mexicana que en menos de 15 segundos monta una red complicada de techos de lona y plástico autodrenables, convirtiendo el tianguis en un laberinto psicodélico de luces rojas, amarillas, verdes y azules
- el precio incluye piropos del asistente/empacador
Voy a extrañar los tianguis...
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